¿Qué dirían Kelsen o Cossio?

¿Qué dirían Kelsen o Cossio?

¿Qué dirían Kelsen o Cossio?

Según uno se ponga, en estos momentos políticos de España, podemos entender a una u otra parte.

¿Cuáles son esas partes? 

  • Una es la que está sorprendida que un prófugo de la Justicia española como Puigdemont, se reúna con políticos españoles y establezca pactos tendentes a obtener una amnistía y posterior referéndum sobre la autodeterminación de Cataluña.
  • La otra parte entiende (debo interpretar) que el referéndum frustrado y manifestaciones consecuentes han sido hechos claramente políticos y que reflejan un deseo de una parte del pueblo catalán. Así dicho esta parte considera a Puigdemont un perseguido y exiliado político y que la aplicación de la ley por la justicia española requiere un cambio, no de jueces sino de leyes, terminando por la constitución.

Evidentemente esto supone un choque entre el poder judicial y el ejecutivo, que se pretende resolver dentro del poder legislativo con cambios y adaptaciones, de ahí que el apoyo de los grupos nacionalistas sea imprescindible para ese propósito.

Las independencias siempre han costado luchas y derramamientos de sangre. Los que ganaban imponían su nueva legislación y los que perdían iban presos o eran fusilados en aplicación de la antigua.

Nuestra historia reciente muestra una vía pacifista y otra violenta de pretender reconocimientos nacionales; catalanes y vascos representaron y representan dos medios diferentes tendentes al mismo objetivo más allá del argumentario de combatir a Franco, etc. de la ETA. Los dirigentes vascos actuales se reúnen con los dirigentes catalanes para pactar un futuro común, encauzado dentro de una lucha  con destrozos  urbanos a la manera de las manifestaciones francesas pero no sangrienta .

Podríamos esbozar un criterio,¿dentro del combate político existe una fundamental diferencia entre ser pacífico o violento?.

Parece que sí; creo que la Vicepresidenta de gobierno no habría ido a reunirse con Puigdemont si hubiera sido un perseguido por un delito de sangre.

¿Qué dice la filosofía del derecho frente a todo esto? Centrándonos en los iuspositivistas (con Kessel) y los egológicos (con Cossio) cuando un juez da una orden de detención a un policía y éste no la obedece, y el delincuente se va tranquilamente, eso significa que el presupuesto subjetivo de una norma común, que cada uno tenemos, se ha quebrado.

Estos quebrantamientos los estamos viendo, ¿estamos frente a una transgresión reprimible con la ley vigente en la mano o estamos ante un incipiente cambio que va a modificar la constitución, va a promulgar una amnistía , va a autorizar referéndums, y va a autorizar que nazca un nuevo orden territorial y legal si es que la voluntad de los ciudadanos así lo quiere?  

Los corsés encorsetan y cuesta moverlos pero….¿incluso no sería más verdadero hacer una consulta popular sobre este probable cambio de sistema dentro de la democracia parlamentaria?